UNA IMAGEN, MIL PALABRAS O UNA ACCIÓN

Ni ha sido la primera, ni será la última vez que aficionados sufren tratos vejatorios en los estadios por parte de la seguridad privada de los equipos.
Dicen hacer lo que les mandan, no cabe duda de ello. La pregunta es si lo que les mandan es sensato, atiende a un mínimo de educación, o al menos a una presunción de inocencia.
Hay quien realiza algún que otro desplazamiento durante la temporada, y hay quien espera ansioso el siguiente viaje para seguir sumando kilómetros, por ello, cuando se cuentan las vivencias de los viajes, es difícil que el oyente se sienta identificado de no haber estado allí. 
Partiendo de la base que ya no hay vuelta atrás en cuanto a los datos que hay que facilitar para comprar una entrada, podemos sumarle lo complejo que puede llegar a ser un partido de alto riesgo. Pongamos el ejemplo de Soria, una ciudad que durante años ha tenido equipo en Primera, por la que han pasado multitud de aficiones visitantes y en la que no consta ningún tipo de altercado de gravedad.
Debido al gran número de oviedistas desplazados en los últimos años a Los Pajaritos, se estimó oportuno clasificar como "alto riesgo" los enfrentamientos contra el Numancia. ¿Resultado después de estos años? Ningún tipo de problema entre aficiones, meticulosos cacheos e innecesarios cacheos y un montón de dinero en las cajas registradoras de los bares del centro.
De ser de alto riesgo, se entiende que no sería muy normal dejar a tanta gente suelta por la ciudad, pero de momento, llegar en coche a una ciudad para comer no es algo que esté prohibido por La Liga.
Lo que sí quieren prohibir es todo lo demás, este año pudimos conocer a través de redes sociales como un oviedista que viajaba con su hijo se vio en la surrealista situación de tener que partir una manzana que llevaba para el niño. Hace dos años nos las vimos y nos las deseamos para explicar a la seguridad del Numancia el significado de la bandera del Genoa CFC que portamos en algunos viajes. Casos absurdos, aislados, que se cuentan en redes entre conocidos o en el bar al día siguiente, pero si pudiésemos ver uno a uno todos los cacheos y situaciones surrealistas que se viven simplemente a la entrada de un estadio cuando se acude de visitante no nos haría tanta gracia.
Es conocido el dicho de "una imagen vale más que mil palabras", eso fue lo que pasó en el último derbi de la historia (hasta la fecha). De no haber existido imágenes de los cacheos, quizás hubiese quedado como en otras situaciones en quejas por parte de quienes los sufrieron, rabieta de los aficionados y a otra cosa. La diferencia de esta ocasión fue tener pruebas, sin trampa ni cartón, de lo que estaba pasando en la entrada. Y no queremos pensar que pasaría si se pudiese ver como fue el cacheo uno por uno.
El caso es que en esta ocasión hubo pruebas, todo el mundo pudo verlo y compartirlo, no se quedó en alguien contando a sus allegados lo que le había pasado, desde nuestras redes sociales hemos contabilizado casi 1.000.000 de visualizaciones de los tres videos publicados de cacheos. Sumemos a esta cifra las visualizaciones desde otras cuentas y medios de comunicación que descargaron los videos y los publicaron. Así como los telediarios que emitieron las imágenes. 
Una imagen vale más que mil palabras, es cierto, pero la diferencia esta vez fue actuar, no pasar de largo mientras trataban así a otros oviedistas y grabarlo. Por todos es conocida la fuerza del oviedismo en las redes sociales, precisamente la herramienta de propaganda favorita de aquellos que quieren hacer del fútbol su juguete, por ello tras todo lo que ha pasado os pedimos que en caso de volver a producirse una situación así la grabéis y compartáis, estáis en vuestro derecho, los que no tienen derecho son otros para dar un trato impropio a los aficionados.
Gracias a todos los que nos habéis escrito durante la última semana, así como a todos los que habéis compartido lo que pasó en los cacheos y habéis dado un paso contando vuestra vivencia. Ante los abusos no podemos quedarnos de brazos cruzados.
REAL OVIEDO CULTURE FANS